De los sucesos acontecidos en Marmolejo sobresalen dos dentro de la tradición cristiana, en nuestra Villa sufrieron martirio dos figuras destacadas del santoral católico como son San Máximo y Santa Eugenia de Córdoba.
En los primeros tiempos de la cristianización de la provincia romana de la Bética, aproximadamente año 50 dC, la ciudad romana de Útica (la actual Marmolejo) era sede episcopal, su primer obispo fue San Máximo quien fue martirizado en Útica en compañía de los Santos Magno y Casto el día 4 de septiembre del año 66 dC, dentro de una de las persecuciones que el emperador Nerón ordeno contra los cristianos. Según la tradición católica fue uno de los discípulos que el Apóstol Santiago trajo a España. Fueron muy venerados en Marmolejo, teniendo cofradía propia en el Siglo XVIII, cuyos estatutos aún se conservan. Su fiesta se celebraba el mismo día 4 de septiembre.
Casi nueve siglos después, en el año 923 dC, en medio de la persecución del califa Abd-er-Rahman III (912-961), el día 26 de marzo, fue martirizada en Marmolejo Santa Eugenia de Córdoba, joven con voto de virginidad, miembro de una familia mozarabe, es decir, que profesaba la fe católica aunque viviesen en territorio musulman. Fue encarcelada en el castillo de la localidad, torturada y decapitada.
En el año 1544 se halló en la iglesia cordobesa de San Pablo una inscripción epigráfica que hablaba de la mártir cordobesa, relatando su martirio y la fecha exacta del mismo. Dicha inscripción dice así:
«(E)….c.. li..ovi box quodque nra
victrix (et turbas carnis) post ire sopitas
genu… (perag)ens truculentum
exc..ri(s)que fecunda
nobis hic.. ebis… suripire tentat
in celo dehinc merita per secula vibens
adiuncta pollet curie sanctorum in arce
merc(r)ede pulso rutili sub sole coruscat
ambiens sacri gloriam de merce cruoris
rex tribuit cui coronam per secla futura
tu itaque nutibus martir nos manda divinis
idem sub era nobies centum iugulatur
(r)… sexagies et uno septem de kalendis
a… dpta aprilis»
Tomando la letra inicial de cada verso se lee en acrónimo:(E)vgenia marti(r). Los restos de la Santa se conservan en una urna en Nájera (La Rioja).
El Castillo del que hablábamos más arriba se encontraba aproximadamente entre el comienzo de la actual Calle Zapateros y la Calle Castillo, sus restos se conservaron hasta comienzos del siglo XX cuando se derribaron en 1921 para iniciar el ensanche del casco urbano con la construcción de la Calle Zapateros.